Desnudo de la ecuatoriana Yolanda López para el verdugo

Si Eva no pecó por andar desnuda en el Paraíso, tampoco creemos que lo haga Yolanda López, al posar en estas fotos candentes y exclusivas para El Verdugo. Sencilla, sin poses de diva, la sacamos de su casa con una gripe que la tuvo varios días en cama.

Aún así llegó puntual, y sin pena para ella pero para gloria de nosotros, se despojó de su ceñido vestido negro que desde ya resaltaba su despampanante figura y empezó a mostrarse tal cual es ante el lente del maestro Jorge Quimí.

Afortunadamente, el frío del estudio fotográfico no empeoró su catarro, y mucho menos la inmutó.

Lo hizo con una inocencia de niña, como esas infantes que aún no tienen conciencia de la malicia de este mundo.

Más aún, teniendo a todo un equipo de producción frente a ella, casi casi con taquicardia.

Y es que Yolanda lo hace tan natural, tan sensual y cotidiano, que los avergonzados éramos nosotros.

“No me dan miedo los desnudos, me gusta andar así en mi casa. Así me ven mis dos hijos pequeños. En cambio, a mí me daría miedo salir a tomar con hombres”, señaló esta bella guayaquileña de 24 años.

Con cada movimiento que hacía, el olor a caramelo de su piel perfumaba el salón. Por un momento, Julio Jaramillo se nos vino a la mente con eso de “en el negro azabache, de tu blonda cabellera; en el rojo escarlata, de tu boca tan divina”. Y eso que no hablamos del resto. JJ tuvo que haber visto a este monumento de mujer en sus sueños. Yolanda López se dio a conocer en el reality Las Divas de la Seducción, del programa Vamos con todo, de RTS.

Además, muchos la han visto realizar bailes y shows eróticos en varias discotecas de Guayaquil.

Actualmente prepara uno para este fin de semana, interpretando a Lady Gaga. Pero lo que la lanzó a la fama fueron unas fotos, también en “traje de Eva”, publicadas el año pasado en un sitio web.

Desde entonces, no le faltan las propuestas de trabajo. Ella quiere llevar a otro nivel los espectáculos eróticos, sin que se los satanice ni entren en el campo de lo vulgar. Espera que el término vedette -así ella se define- sea considerado una expresión artística como lo es en Argentina, Francia, y otros países.

Iris Chacón es una de sus inspiraciones que la motivan a llegar lejos en este arte. Así, como desnudó su cuerpo, también lo hizo con su alma. Cuando recién la vimos se mostraba distante, pero poco a poco fue apoderándose de nosotros con una mirada que dejaba ver su interior.

“No porque haga shows eróticos ni pose desnuda significa que soy una mujer fácil”. Pese a conquistarnos con su dulzura, dice ser temperamental. Recuerda que en su trabajo no ha faltado quien se haya querido propasar, ante lo cual ha tenido que reaccionar explosivamente.

Critica la doble moral que existe en el país, y a ciertas mujeres que cuestionan este tipo de espectáculos, pero sin embargo “hacen otras cosas que sí son malas”.

Aunque reconoce que “todos tenemos rabo de paja”, piensa no caer en los escándalos públicos en los que han estado envueltos algunos personajes de farándula. Al término de esta sesión fotográfica algunos habíamos quedado sin aliento.

Se cubrió su busto con una capa negra de terciopelo, que le llegaba un poco más abajo de la cintura. Caminó con una sensualidad innata y lentamente la veíamos alejarse por el pasillo hacia los vestidores.

Le preguntamos si no se iba a inyectar para curar su gripe, pero nos dijo que le dan miedo los pinchazos. Solo quería regresar a su casa, meterse a su cama solitaria de 3 plazas y dormir abrigadita para estar buena y sana para su próximo show.

Esperamos que recobre pronto su salud; porque buena, hace rato que ya está.

Fuente: Guayaquil Caliente